Nuestro enfoque está en los miles de millones de consumidores con poca o nula bancarización, que actualmente se encuentran excluidos de aquellos servicios financieros que tantas personas dan por sentados.

Fundamos Prosperas para permitirle a las entidades crediticias el intercambio confiable de datos de primera mano, no tradicionales, y con el consentimiento del consumidor, para que a su vez ellos puedan evaluar la solvencia de cualquier persona que cuente con un teléfono móvil. Creemos que nadie se debe quedar sin calificación. Estamos comprometidos con las comunidades en las que servimos, a través de implementación de programas de educación financiera, especialmente hacia mujeres y poblaciones marginadas. Creemos que toda persona debe contar con el conocimiento financiero y los servicios para mejorar sus vidas.